Agosto en la costa andaluza, entre Marbella y Roche

         


                                                                      
Es un verano diferente y atípico para mí. Una etapa de reflexión,  cogiendo fuerzas para la incertidumbre laboral que estoy atravesando. 

Me he venido sola al apartamento que tiene mi padre en Calahonda, muy cerca de Marbella. Agradecida a él por compartirlo y por tener un lugar donde venirme para disfrutar del mar, el sol y la tranquilidad. Aquí tengo algunas amigas y sobre todo, Mamá está siempre bien impregnada en esta casita donde siempre fuiste feliz Mami, te daba mucha vida y descansabas bajo el sol que tan bien te venía para tus huesos.



Llegué el lunes 5 de agosto tranquilamente después de unos días de retiro con mi Padrecito y de comer con Papá, Edu y Lidi. 

Después de organizar la casita y la compra, quiero disfrutar cada día de la playa que linda con Puerto Cabopino, es mi favorita. El agua está transparente y limpia. Es una zona tranquila rodeada de pinos y mucha naturaleza donde siempre nos gustaba venir a todos, una delicia porque apenas hay gente. Aquí respiro paz y descanso. Lo necesitaba.



Un jueves, mi amiga Vir nos propone comer en el precioso jardín de su casa con las amigas del cole, con Sarita, Marcia y Allen. Tortilla riquísima, langostinos, albóndigas y vino blanco fresquito..., un planazo! Nos encanta disfrutar juntas de este plan cada agosto cuando estamos por aquí, viva la vida!



Mis paseos por el Puerto de Cabopino que tanto me recuerdan a mi juventud donde fui tan feliz, las puestas de sol sobre las montañas, leer y leer en la playa, los baños en esta playa tranquila...Una vida sencilla y agradable que me dan vida para el resto del año y todo el invierno que queda por delante. 



Este verano está siendo difícil por la incertidumbre laboral, estoy rezando más que nunca para que me dé mucha fuerza y la divina providencia me abra una nueva ventana y bien grande en mi vida, lo necesito! Gracias a la idea de Marcia, estoy rezando cada día un rosario, cuesta ponerse pero cuando lo termino me siento tan en paz que merece la pena la dedicación porque ya es devoción a nuestra Madre María. 

Algún día, desayuno temprano con Marcia y con Elvis, les encantan las porras con churros...Una delicia poder compartir estos ratos juntas Marciii y que me cuentes tu aventura de vida y optimismo!

Mi amiga Piluquita también me propone planes de playa por la tarde en su casa. Nuestros baños y charletas son ya un clásico cada verano... Mucha suerte de tenerte Piluquita siempre cerca y tan atenta.


     


Me llama Cinti desde Cabo Roche, me propone irme para allá el 14 a celebrar el cumple de Keko, me apetece una barbaridad! Siempre me entusiasma recorrer la costa de Cádiz, desde Tarifa que ya forma parte de mi vida donde me chifla ir siempre a pasear y a cenar atún, hasta la playa de Zahora con su faro, la Breña y Caños de Meca, El Palmar, Conil...

             

Y ahora que recién acabo de conocer Cabo Roche, me ha rechiflado el plan tan rural y su naturaleza. Comimos en El Kalima en Zahora y cenamos en una venta en Roche, me supo a gloria bendita!! Gracias a los dos por la maravilla de días que hemos disfrutado juntos y de las risas constantes!! Los verdes azulados del mar, la arena dorada de las playas, la luz alegre y cálida y su gente...soy feliz siempre en esta tierra. Espero volver pronto!




Ya es finales de mes, estoy escribiendo desde la playa de Cabopino. Me siento muy agradecida por todo lo que estoy madurando y aprendiendo, por todo lo que me estás levantando Señor en esta etapa de incertidumbre, aunque me falta costumbre de Confiar plenamente en Ti, lo voy consiguiendo día a día con mi granito de arena para Ti. 

 

                        

Antes de llegar a Madrid, me paso por la maravilla ciudad de Baeza donde me quedo una noche con Boli, la madre de Reyitas. Es la primera vez que visito este lugar, menuda historia y patrimonio tiene esta ciudad!!!!


Sé que me tienes preparado algo grande para ser feliz en mi trabajo y poder amar con el corazón que me has dado y que, gracias a Ti, cada vez es más grande, dulce y tierno. Me pides paciencia en esta etapa de desierto en la que estoy aprendiendo y avanzando muchísimo. Resiliencia, serenidad, madurez viviendo y aprovechando cada día dando lo mejor de mí. El amor es lo más grande que hay y es lo único que hace feliz.
Asi que ahí sigo, avanzando en el camino del corazón, oleeee, y a seguir así, gracias, gracias, gracias!



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